Grajos es un poema que escribí hace tiempo modificando el famosísimo poema del gran Pablo Neruda, el vigésimo poema de su libro Veinte poemas de amor y una canción desesperada, que podéis leer en la biblioteca virtual Ciudad Seva en el siguiente enlace. Espero que os guste mi versión y que sigáis al tanto de las noticias que iré dando por facebook y por twitter.
Puedo escribir los
versos más tristes esta noche,
pero no es de noche, ni
estoy triste,
pero tampoco es de día,
ni feliz me siento.
El sol huye de mí y la
luna me evita.
Puedo escribir los
versos más tristes esta noche,
escribir que ya no te
quiero, que mi vida es hielo.
La peregrinación de las
almas me atormenta,
y el dolor, como todo,
acabará resultando efímero.
Te quiero y tú a veces
me quieres a mí,
pero no quieres
quererme y cuando lo haces no lo sabes.
Puedo escribir los
versos más tristes esta noche,
cuando tu corazón ya
tiene nuevos huéspedes.
Escuchar la música
satánica de las estrellas,
mirar al horizonte,
negro, horrible, marchito.
Qué importa que mi amor
no tenga fin,
si esta maldición no se
irá, huirá, fluirá, caerá.
Los amores pasajeros
son historias vetustas,
inusuales casos de
engañados insensatos.
Como para acercarte mis ojos te buscan,
mi corazón te busca, y
tú no estás conmigo.
La noche en que el
reloj se paró,
la noche en que
nosotros fuimos luna.
Ya no te quiero.
Miento, siempre lo haré.
Mi voz se ha vuelto
revolución y calla sin ti.
Ya no, ni antes, ni
después. Nunca.
Y el nunca es tan
efímero como el siempre.
Te digo que no te
quiero porque no quiero quererte,
es tan corto el amor y
tan largo el olvido.
Porque en momentos como
este te tuve, cerca,
mi alma no se contenta
con haberte conocido.
Y sé que éste no es el
último dolor que me causas,
ni estos los últimos
versos que te escribo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario